El proyecto Casa Inzeta está destinado, principalmente, a aprovechar todo el potencial de sus espacios e integrarse al entorno. Cuenta con una cubierta, a modo de jardín, que funciona como mirador hacia toda la pradera que se encuentra frente a la casa. El proyecto está inspirado en la forma de los templos japoneses, como un espacio sagrado para habitar y meditar en constante diálogo con la naturaleza.